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Síndrome de las Úlceras Gástricas Equinas

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¿Qué es?

La ulceración gástrica es una enfermedad grave y frecuente que afecta a caballos de cualquier edad y aptitud, desde el pony de paseo al caballo de alto rendimiento.

Los estudios indican que la incidencia de SUGE es:


37% de los caballos de paseo
63% de los caballos de deporte
93% de los caballos de carreras en entrenamiento4
50% de los potros durante los primeros meses de vida pudiendo no mostrar signos clínicos. En algunos casos acaban con la vida del potro.

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Causa

El SUGE engloba un conjunto de desórdenes que acaban produciendo una lesión en la mucosa del esófago, el estómago o el duodeno, inducida por los ácidos gástricos. En la mayoría de los casos sólo afecta a este último órgano. Las úlceras gástricas se desarrollan cuando los factores agresivos -como el ácido y las enzimas digestivas- superan a los factores protectores de la mucosa gástrica.

Las úlceras pueden producirse en ambas regiones del estómago: escamosa y glandular


1) Ulceración en la escamosa: La parte interna de la región dorsal del estómago, está cubierta por un epitelio escamoso no glandular. Las úlceras en esta región ocurren como resultado directo de una exposición al ácido. La mayoría de las úlceras tienen lugar en la curvatura menor del estómago, adyacente al esófago, donde el epitelio es particularmente sensible a la secreción ácida. En potros neonatos el epitelio escamoso es más fino que en los adultos, lo que incrementa su susceptibilidad a las ulceraciones gástricas.

2) Ulceración en la glandular: La parte interna de la región ventral del estómago posee glándulas capaces de producir una capa de mucosidad protectora rica en bicarbonato. Las úlceras en esta región se producen cuando esta mucosidad protectora está dañada, provocando erosión ácida en la pared gástrica. Es en esta parte del estómago donde se localizan las células (parietales) que producen el ácido gástrico (ácido clorhídrico) mediante las llamadas bombas de protones. La actividad de las bombas de protones está regulada por tres vías: 

Neuroendocrina. A través de la acetilcolina proveniente de los nervios de la pared del estómago. 


Endocrina. A través de la hormona gastrina. 


Paracrina. A través de la histamina, somatostatina y prostaglandinas10.

Tipos de úlceras

1) Mucosa glandular


2) Mucosa escamosa

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Síntomas clínicos

Es importante tener en cuenta que los caballos pueden tener úlceras gástricas severas (confirmadas por gastroscopia) sin, inicialmente, mostrar signos externos y, cuando los presentan son, en general, muy inespecíficos. En un estudio con 187 caballos se encontraron úlceras en el 92% de los caballos que presentaron signos de ulceración gástrica como molestias abdominales, falta de apetito, pérdida de peso o diarrea. No obstante, las úlceras gástricas se encontraron también en más de la mitad de los caballos que no mostraron signos de enfermedad gastrointestinal.

Caballos adultos:


Bajo rendimiento deportivo


Falta de apetito y pérdida de peso


Mala condición corporal, pelo sin brillo


Cólicos de intensidad media o recurrentes


Debilidad


Cambios de comportamiento

Potros:


Decúbito dorsal frecuente


Falta de apetito


Mala condición corporal, pelo sin brillo


Diarrea


Depresión


Bruxismo


Ptialismo


Cólicos intermitentes

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Diagnóstico

La existencia de uno o más de los signos citados puede orientar el diagnóstico y hacernos sospechar de la presencia de úlceras gástricas, pero solo se puede hacer un diagnóstico definitivo mediante gastroscopia. Sólo la visualización de las úlceras su tipo y su gravedad, permitirá una prescripción y un pronóstico adecuados.

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Tratamiento

Omeprazol:


Es un potente inhibidor de la secreción de ácido clorhídrico, creando un entorno en el cual las úlceras gástricas pueden cicatrizar y curar. El omeprazol es un inhibidor de la bomba de protones porque bloquea el sistema enzimático responsable de la síntesis del ácido clorhídrico. Esta fijación es irreversible e inhibe, independientemente del estímulo, la secreción del ácido gástrico hasta que otras bombas se sintetizan. Esto permite mantener el pH por encima del límite de aparición de las úlceras durante más de 24 horas.

Antiácidos:


Bloquean, mediante antagonismo químico, el ácido producido por las células parietales del estómago, pero no impiden que continúe la actividad de las bombas de protones. Esa es la razón por la que deben administrase repetidamente y por la que se produce el llamado “efecto rebote” cuando desaparece su efecto. No existen estudios que demuestren que el tratamiento con antiácidos permita o favorezca la curación de las úlceras gástricas en caballos.

Antagonistas del receptor de la Histamina:


Este grupo incluye la cimetidina y la ranitidina. Al contrario que el Omeprazol, la efectividad de estos medicamentos es dependiente de la concentración en plasma. En consecuencia, la magnitud y la inhibición ácida es muy variable en los caballos. Sus efectos son, en general, de corta duración por lo que es necesaria la repetición del tratamiento inyectable cada 8 horas.

Agentes protectores:


El sucralfato ha sido usado para cubrir las úlceras con el objetivo de protegerlas del ataque de los jugos gástricos. Su efectividad clínica no ha sido determinada y los agentes protectores no se han registrado como tratamientos para las úlceras gástricas.

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Prevención

La prevención del SUGE pasa por el conocimiento de los factores de riesgo que favorecen o predisponen a la formación de úlceras en el estómago, teniendo en cuenta que los caballos y los potros pueden desarrollar úlceras grave incluso en ausencia de los mismos.

A | Ejercicio intenso:


Existe una gran correlación entre el entrenamiento y las úlceras gástricas, y no solamente en caballos de carreras. Incluso el entrenamiento moderado se asocia con una alta prevalencia de lesiones en el estómago. Se ha demostrado que el flujo sanguíneo del estómago se reduce con el ejercicio. La mayor presión en el abdomen durante este periodo empuja al ácido hacia la región escamosa del estómago.

B | Alimentación


En los caballos, la secreción ácida en el estómago es continua por lo que mantener periodos prolongados sin que el caballo ingiera alimentos (principalmente forrajes) que neutralicen esta acidez contribuyen a la ulceración. Cuando se impide a los caballos el acceso al pasto o al forraje a libre disposición, las úlceras pueden desarrollarse rápidamente . El tipo de alimentación también puede afectar al desarrollo de las úlceras, pues los niveles de gastrina postpandrial aumentan con el consumo de grano o de pienso concentrado, en comparación con el forraje. El uso de alimentos concentrados también puede contribuir al riesgo de úlceras reduciendo el tiempo empleado en la alimentación e incrementando los niveles de gastrina sérica.

C | Estrés físico y enfermedad


Se ha demostrado que el transporte de los caballos y su confinamiento en establos son ulcerogénicos. Los caballos con enfermedades concurrentes tienen un alto riesgo de desarrollar úlceras glandulares, especialmente los potros. Además, en los caballos que requieren anestesia para cirugía, el riesgo de ulceración aumenta.

D | Medicación


Los antiinflamatorios no esteroideos (AINEs) no selectivos (COX1 y COX2) pueden producir efectos gástricos adversos debidos a la inhibición parcial de la síntesis de prostaglandinas, las cuales intervienen en la secreción de moco gástrico protector y en la regulación del flujo sanguíneo en la mucosa gástrica. Estos efectos gástricos secundarios han sido demostrados con dosis de AINEs superiores a las recomendadas.